Era lunes 23 de abril, alrededor de las 5:15 p.m. y acababa de despedirme de mi amigo David que està acà de vacaciones y acababamos de hacer un pequeño paseo por el centro de Roma. Iba yo en el metro de la linea A en direcciòn a la ùltima estaciòn que se llama Anagnina. Faltaban como 6 paradas y de pronto nos sacaron a todos los pasajeros del metro y nos dieron una botella de agua. Yo no sabìa que estaba pasando. Ademàs nunca habìa estado en la Estaciòn del Arco de Travertino y no sabìa qué coger para llegar a mi destino final. Al salir de la estaciòn una multitud de gente invadìa las calles, casi no podìa caminar, ni sobrepasar a la gente, mi celular no tenìa señal, tambièn estaba incomunicada. Frente a mi empezaron a pasar ambulancias y carros de la policìa. Finalmente me sentè en un andén y pude llamar al Señor de Jolie para que llegara a mi rescate. Lo multaron dos veces por hacer un cruce prohibido y por estacionarse donde no devìa para esperarme. Luego de una hora llegò y yo aùn no sabìa que habìa sucedido.
En el noticiero de la noche, pude ver que en la estaciòn donde yo debìa haberme bajado del metro, un senor se habìa botado al carril, pero su intento de suicidio, habìa fallido, saliò gravemente herido, y habìa detenido el servicio en esa àrea por algunas horas. Puede sonar un poco campesino, pero me asusté muchìsimo, pensé que se trataba de un atentado. En el mundo de hoy, todo se puede esperar. Pobre hombre, la vida le ha dado otra oportunidad, espero que la aproveche.
Por otro lado, estoy bastante feliz, parece que comenzaré a trabajar (finalmente) en una empresa muy importante, esta semana se define y escribiré proximamente sobre eso. Era la oportunidad que estaba(mos) esperando.
Una semana llena de Episodios emocionantes!
Feliz Semana.